La alcaldesa de Valencia reclama a Zapatero que el 0,7% del dinero correspondiente a la ciudad del Plan de Inversión Local, (985.000 euros de los 141 millones) se destinen a proporcionar alimentos a las entidades dedicadas a dar de comer a los más necesitados. Su preocupación es lógica y entra dentro de sus funciones, no de ahora sino de siempre, por lo tanto lo que me llama la atención no es su repentina preocupación sino la dirección que apunta para buscar soluciones.
Me sorprende que no reclame desde hace tiempo que se ponga en marcha, de verdad y sin demagogias, la Renta Garantizada de Ciudadanía, con la que muchos de los que acuden a los centros sociales y a las cáritas parroquiales no lo harían.
Quiero recordar que el 18 de diciembre ya denunciábamos en este blog la minoración que la Consellería de Bienestar Social hacía sobre el presupuesto de este programa y que justificaba con estas palabras: “Vistas las necesidades de crédito previstas para atender el proyecto T6355 «Renta Garantizada de Ciudadanía» durante la anualidad 2008, existe un crédito retenido sobrante en dicho proyecto, por lo que procede desafectar y minorar el mismo”. (DOCV núm. 5909 de 09.12.2008). La cuantía inicial prevista era de 5.680.000 euros, de la que se gastaron 2.500.000 euros (todavía no sabemos donde) por lo que la cantidad sobrante a minorar era de 3.180.000 euros.
Es decir que no dice nada de la retirada de más de 3 millones de euros por parte del Gobierno de la Comunidad Valenciana y reclama menos de 1 millón de euros al Presidente Zapatero. Y para rematar la faena, el concejal de Seguridad Ciudadana Miguel Domínguez, eludiendo cualquier tipo de responsabilidad en el tema, dice que "si no hay comida para los pobres de esta ciudad será culpa de Zapatero".
No deja de asombrarme esta ceguera selectiva de la Sra. Alcaldesa y su gobierno. Pero tampoco deja de alarmarme el silencio cómplice de ciudadanos y entidades valencianas ante la negligencia del gobierno del Sr. Camps en el cumplimiento de sus obligaciones. Habrá que recordarle que la Renta Garantizada de Ciudadanía es un programa con rango de Ley aprobada en 2007 y que se recoge en el nuevo Estatuto de la Comunidad Valenciana. Solo tiene que ponerla en marcha. Eso sería un funcionamiento normal. Pero en esta Comunidad lo normal no existe, todo tiene que ser pionero e innovador, aunque para ello tenga que crearse antes la situación de caos que reclame actuaciones extraordinarias.
miércoles, 14 de enero de 2009
ATENCION A LOS NECESITADOS
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Efectivamente...., yo, como la Estone, venimos del cine, y seguro que a ninguna de las dos, nos hubiese molestado lo más mínimo que la pasta que se gastaron para el estreno europeo de la última del Bond, lo hubiesen destinado a los comedores sociales de la ciudad. Lo que me molesta es que el dinero que el gobierno pone expresamente para que desde las instituciones más próximas al ciudadano generen trabajo, y evitar así que muchas familias tengan que acudir a comedores de caridad porque están en paro, se tenga que destinar a bombo y platillo demagógicamente a lo que no toca. Rita ahorra en despilfarro y con lo que tienes genera puestos trabajo, que eso es lo que quiere la ciudadanía.
ResponderEliminarMuy bien lluna, muy bien Pataki, yo no lo hubiera dicho mejor.
ResponderEliminaruna cosa es dar una renta como un derecho y otra dar de comer, lo primero es eso, un derecho, y lo segundo es la beneficiencia y la caridad de toda la vida que es lo que estos saben hacer. No se de que nos extrañamos, la derecha siempre es asi, y ahora ademas es metirosa. Calla Rita que se te nota mucho que tu si que comes y bebes bien.
ResponderEliminarGracias cielo, nos vemos en la próxima de Corcó.
ResponderEliminarEfectivamente estómago lleno, lo de jugar a remediar, como en la canción de Cecilia (Dama, Dama), les va, les va, les va... (como la canción de Julio Iglesias).
Gracias por vuestras opiniones. En efecto la distancia entre el derecho y la beneficiencia es la que permite a una persona vivir dignamente en la sociedad o hacerlo gracias a la "bondad" de otros.
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