En un país monocolor....

Con la música de la abeja maya, vamos desgranando el futuro las medidas de los distintos gobiernos conservadores, que monopolizan la administración pública española, van lanzando un aviso a navegantes permanente. Golpe a golpe, tramo a tramo se van lesionando derechos alcanzados con enorme esfuerzo por los ciudadanos, por los trabajadores, por las mujeres, por las personas con discapacidad. Ahora le ha tocado el turno a Nuñez Feijó que ha decidido ,que no va a pagar las bajas de los funcionarios de la Xunta. La salud ya no es un derecho es un lujo, únicamente se podrá poner enfermo aquel funcionario que se lo pueda pagar ya que se producirá un recorte sustancial de los emolumentos de aquel insensato que decida faltar al trabajo debido a una enfermedad. Precisamente estamos frente a uno de los símbolos de la lucha obrera de finales del XIX, con las cajas de resistencia para garantizar el sustento de aquellos trabajadores que, fruto de las duras condiciones laborales, enfermaban quedando desasistidos ellos y sus familias durante el periodo que no acudían a su trabajo. Ya lo hemos repetido en alguna ocasión en este blog, estamos en medio de un viaje de ida y vuelta en materia de derechos sociales, para algunos gobernantes lo moderno es volver al pasado, la atención domiciliaria tiene más que ver con Mary Poppins que con la Ley de la dependencia, en definitiva un paso atrás grave, muy grave que nos pone en la senda de lo que va a ir ocurriendo en el resto de administraciones públicas y en general en materia de derechos sociales. Habrá que estar muy atentos a la reforma laboral y sus consecuencias para el conjunto de los trabajadores españoles. Si la reciente medida gallega la tenemos que entender como un síntoma … entonces estamos en situación de enfermo terminal y además sin retribución