Sin prisas, a ritmo Mariano

Es verdad que se nos está haciendo muy, muy larga esta legislatura que apenas acaba de comenzar, motivos para la pesadez no falta, en primer lugar la “calma chicha”, aquí nadie dice nada, el Presidente continúa mirando hacia otro lado como si esto no fuera con él, ni siquiera ahora que es el máximo responsable de lo que nos vaya a pasar. Vamos a ver si los anuncios de noticias graves se van a demorar a marzo para no asustar al electorado andaluz, entonces, "a que santo" era tan necesario convocar unas elecciones anticipadas, no parece que la situación internacional esté demandando nada nuevo en estos meses al Ejecutivo español, por tanto, ¿a que venían las prisas?. De las pocas novedades que se han producido, la más relevante, el nombramiento de ministros, si tenemos que opinar desde este blog, sobre los nombramientos efectuados por Rajoy hay que felicitar al Presidente por el secretismo con el que ha gestado la selección de sus más directos colaboradores, no se filtró absolutamente nada y la lentitud en los nombramientos del segundo escalón viene a confirmar la idea de que el cargo le vino a alguno de sopetón y sin esperar que sería desginado, dicho esto, poco más se puede decir a favor de un Gobierno que rompe una tónica reciente, en cuanto a paridad de género, tampoco es muy alentador el saber que contamos entre nuestros pilotos de la nave estatal con alguno que se entrenó en las procelosas aguas de los negocios de Lehman Brother, la vinculación con la industria armamentística del Ministro del ramo ¿una coincidencia? y las primeras declaraciones de la Ministra Sanidad e Igualdad, dejan en pañales alguna de las perlas de su antecesora y en este caso nadie se ha metido con su aspecto físico, pero bueno ...100 dias, debemos dejar pasar un tiempo prudente, el único riesgo es que pasemos del invierno a la primavera y aquí siga sin pasar nada…. o a lo mejor es lo menos malo y como dicen algunos el 2012 solamente es la puerta del holocausto 2013, a ver si, entre unas cosas y otras los mayas llevaban razón y estamos muertos y nadie nos lo ha dicho.