martes, 30 de septiembre de 2008

EL DINERO PUBLICO



Acabo de leer en la prensa que Beneixida, un pueblo de la provincia de Valencia de alrededor de 600 habitantes no podrá poner en marcha una guardería recién construida, POR FALTA DE ALUMNOS!!!. La construcción de la guardería ha corrido totalmente a cargo de los presupuestos municipales. Se trata de dinero público, es decir, de los ciudadanos, por tanto es obligación de quienes lo administran (nuestros administradores) que lo inviertan con prudencia, honradez y eficacia, es decir que se gaste en lo que haga falta. Si la guardería no hacía falta ¿por qué se construyó?. Dice la alcaldesa que el proyecto era de la anterior corporación, (me da igual) y que como no tiene comedor, que es lo que hace falta, pues no hay demanda. Bueno pues habrá que hacer cosas que hagan falta ¿no?. Si las necesidades de la población requieren una atención a los menores que incluya comedor no tiene sentido hacer una guardería que no lo tenga.

Esta noticia es solo un ejemplo de lo que llevo planteándome hace tiempo y es, por un lado la disociación que existe entre las necesidades de los ciudadanos y las medidas que se toman y por otro, en la aceptación generalizada, sin mas, de que el dinero público es de quienes lo administran. Los ciudadanos de a pie tenemos tan asumido estos hechos que ni siquiera nos planteamos que esto pueda ser de distinta manera. No nos creemos que el dinero público sale de nuestros bolsillos y que quienes nos gobiernan sólo pueden administrarlo. Si estuviéramos convencidos no consentiríamos que se malgasten los fondos públicos como tampoco lo hacemos en nuestra vida privada. ¿Por qué lo consentimos? Tal vez porque muchos, a pesar de estos desmanes, aun tenemos lo suficiente para vivir y otros, porque saben que hagan lo que hagan no van a solucionar nada. Pero si aceptamos los sinsentidos como algo inevitable sin reaccionar ¿dónde está nuestra libertad y autonomía como personas?.

Y hablando de sinsentidos, tampoco tiene desperdicio el caso de la ludoteca de Cruz Roja en la AP7, inaugurada por Rafael Blasco y que se quedó desierta tras el acto y así sigue, ¿era necesaria?.

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