Parece que la propuesta de Camps de enseñar la asignatura de Educación para la Ciudadanía en inglés, no ha sido bien recibida, tampoco, entre sus propios compañeros de partido de otras Comunidades, diversas informaciones indican que le vienen pidiendo que desista de la “boutade”, además de estas opiniones, no han parado de alzarse voces razonando la imposibilidad de llevar a cabo este despropósito, tanto por las dificultades de disponer de nivel de inglés suficiente, en la mayoría de los profesores, como por la incapacidad de los alumnos para seguir una materia en otra lengua durante todo el curso. Todas estas apreciaciones parecen bastante lógicas y ponen en una situación difícil la decisión última, sobre todo, si consiste en mantener el órdago.
Algo similar parece que está pasando con el contrato de ciudadanía propuesto por Blasco para los inmigrantes que tampoco ha suscitado adhesiones sino más bien críticas importantes, en dirigentes populares en zonas del Estado donde tienen la responsabilidad de gobernar y no les parece una formula adecuada, incluso se ha manifestado en contra un aliado habitual como es la propia Iglesia Católica.
El ruido externo que están generando estas iniciativas un tanto estrambóticas y las operaciones de maquillaje que están realizando con algunos de los aspectos que habían tenido más conflictividad, hacen presagiar un trayecto complicado para estas normas.
No parece que corran tiempos para lanzar pulsos internos con los propios compañeros del Partido Popular y complicar las relaciones entre las distintas sensibilidades, más allá de lo difícil que están las cosas. Especialmente, si se trata de cuestiones que, al fin y al cabo, no son tan relevantes para aquellos que las proponen, ya que únicamente pretendían quedar bien con el jefe y hacer una labor de oposición al Gobierno de Madrid, buscando excusas para evitar la aplicación de leyes vigentes.
Da la impresión que van a llevar razones algunas voces que califican estos comportamientos como de cortina de humo de un Gobierno que debido a su incapacidad de gestionar correctamente lo que tiene obligación, se inventa inabordables con enorme ruido mediático para evitar que se comente su ineficacia y su incompetencia en los temas cotidianos.
sábado, 24 de mayo de 2008
DISCREPANCIAS Y CIUDADANÍA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Si para integrarse, los inmigrantes en la Comunitat Valenciana deben -firmando un contrato- aprender las costumbres valencianas.
ResponderEliminarSi costumbres son el conjunto de cualidades o inclinaciones y usos que forman el carácter distintivo, y si en esta Comunidad va a ser uso distintivo su estrafalaria manera de impartir la asignatura Educación para la Ciudadanía,
¿tendrán los inmigrantes que hacer unos trabajos trimestrales en inglés de textos elegidos por sus padres para considerarles ciudadanos integrados?
muy acertado tu razonamiento, "reducción al absurdo" posiblemente se trata de convertir al inmigrante (y al valenciano) en ciudadanos del mundo, con las costumbres valencianas, bueno un poco de lio ..
ResponderEliminarImpresionante la capacidad de encantar serpientes del Sr. Blasco, que va de un tema a otro, de una Consellería a otra, y en dos tardes ya es el rey. Lean y vean el artículo de hoy del Pais, no entiendo nada: o este señor es supermán, o hay más miedo entre los inmigrantes de lo que nos creíamos....
ResponderEliminarhttp://www.elpais.com/articulo/Comunidad/Valenciana/Blasco/nadie/le/va/imponer/cultura/tradicion/elpepuespval/20080525elpval_9/Tes
efectívametne anónimo, impresionante, la capacidad de determinados políticos para encandilar incluso a aquellos a los que está presentando medidas que realmente no aportan ningún beneficio al colectivo y por supuesto tampoco al conjunto de la sociedad pero que tiene un impacto mediático a través del cual emiten un doble mensaje de preocupación por la integración y a su vez de poner trabas a los inmigrantes, de manera que cada cual lo interpreta según le interese más, posiblemente, al final, todo quedará en humo o en propuestas que no sirvan para nada, pero habrán cumplido su misión propagandística, efectivamente todo un artista, es como el gran mago Hudini, pero sin capa
ResponderEliminar